Los Tres Monos Sabios o Místicos, que se tapan con las manos respectivamente los ojos, oídos y boca, provienen de antiguas leyendas chinas que se difundieron en Japón con la llegada de la escritura en el Siglo VIII. Están representados en una escultura de madera en el santuario de Toshogu, en Nikko , Japón.
Parte de su significado está en el juego de palabras que se origina en japonés entre el sustantivo “saru” que significa mono, y el adverbio homófono que produce la negación del significado de la raíz a la que se asocia enclítico. Las palabras compuestas “mizaru", “kikazaru” e “iwazaru” significan respectivamente “no ve", “no oye", “no habla", y el mono ha pasado a ser un símbolo negativo, ya que si en Japón regalas a alguien un mono significa que quieres verle muerto.
Diferentes interpretaciones Una interpretación indica que para llegar a la sabiduría una persona debe:
Negarse a escuchar maldades
Negarse a ver maldades
Negarse a decir maldades
Según otra interpretación, el significado de las esculturas de "mizaru", “kikazaru” e “iwazaru", alude al miedo absoluto, dado que son las primeras reacciones del ser humano ante una situación de peligro. Otra versión alude a la virtud de la discreción: "No digas todo lo que sepas, no mires lo que no debas, no creas todo lo que te dicen". También se ha extendido su significado al pacto de silencio entre mafiosos conocido como omertá o cualquier pacto de silencio para encubrir delitos o casos de corrupción.
Parte de su significado está en el juego de palabras que se origina en japonés entre el sustantivo “saru” que significa mono, y el adverbio homófono que produce la negación del significado de la raíz a la que se asocia enclítico. Las palabras compuestas “mizaru", “kikazaru” e “iwazaru” significan respectivamente “no ve", “no oye", “no habla", y el mono ha pasado a ser un símbolo negativo, ya que si en Japón regalas a alguien un mono significa que quieres verle muerto.
Diferentes interpretaciones Una interpretación indica que para llegar a la sabiduría una persona debe:
Negarse a escuchar maldades
Negarse a ver maldades
Negarse a decir maldades
Según otra interpretación, el significado de las esculturas de "mizaru", “kikazaru” e “iwazaru", alude al miedo absoluto, dado que son las primeras reacciones del ser humano ante una situación de peligro. Otra versión alude a la virtud de la discreción: "No digas todo lo que sepas, no mires lo que no debas, no creas todo lo que te dicen". También se ha extendido su significado al pacto de silencio entre mafiosos conocido como omertá o cualquier pacto de silencio para encubrir delitos o casos de corrupción.