martes, 31 de marzo de 2009

La Piedra




El distraido tropezó con ella.


El violento la utilizó como proyectil.


El emprendedor, construyó con ella.


El campesino, candado, la utilizó como asiento.


Para los niños fue un juguete.


David mató a Goliat.


Y Miguel Ángel le sacó la más bella escultura.


En todos estos casos, la diferencia no estuvo en la piedra, sino en el hombre...


No existe "piedra" en tu camino que no puedas aprovechar para tu propio crecimiento.