Joaquín Sorolla y Bástida nace en Valencia en 1863, en el seno de una familia modesta. A los dos años queda huérfano y es recogido por sus tíos maternos. Los estudios no le llaman la atención, sintiendo gran inclinación por el dibujo y la pintura. El director de la escuela aconseja que el pequeño Joaquín sea matriculado en la Escuela de Artesanos, donde asiste a las clases nocturnas de dibujo del escultor Cayetano Capuz. En los años siguientes trabajará como cerrajero y coloreando fotografías mientras asiste a las clases en la Escuela de Bellas Artes de San Carlos (1878-1881). En la Escuela empieza a pintar al aire libre animado por uno de sus profesores, Gonzalo Salvá, y después por el pintor Ignacio Pinazo Camarlench.
Sin haber cumplido 20 años Sorolla se traslada a Madrid y descubre en el Museo del Prado, la pintura de Velázquez, cuya manera de representar los fondos y las composiciones determinará muchas de sus obras posteriores. Su carrera artística empieza a cosechar premios y medallas, obteniendo una pensión para estudiar en Roma y París. Contrae matrimonio con Clotilde García del Castillo en 1888, con quien tendrá tres hijos. Los premios son cada vez más importantes, obteniendo una Medalla de Primera Clase en 1895 con Aún dicen que el pescado es caro, obra con la que participa en el realismo social tan en boga aquellos años.