Restauración del retrato del poeta Luis de Góngora y Argote de la Fundación Lázaro Galdiano, muy conocida por figurar en todos los manuales escolares deLiteratura, ha culminado, a manos de técnicos del Instituto Andaluz de Patrimonio Histórico (IAPH), tras casi un año de trabajo.
Este cuadro se atribuyó en épocas a Velázquez, si bien está garantizado que se debe a pinceles del taller del maestro sevillano, y existen otras tres copias de la época, una en el Prado, otra en manos de particulares y, la que se considera "princeps" u original que se conserva en el Museo de Bellas Artes de Boston.
El cuadro sufrió daños al ser prestado para la exposición sobre el barroco "Teatro de Grandezas" que se abrió en Granada en noviembre de 2007, sobre todo en la zona superior, donde padeció varios levantamientos, pero, como explicó la directora de la Fundación Lázaro Galdiano, Jesusa Vega, "los daños se han tornado en beneficios, porque se le han quitado todos los añadidos".
En efecto, la restauradora del cuadro, Lourdes Núñez, explicó que, además de quitarle los repintes posteriores a su época, se han respetado los desgastes y las radiografías han aportado datos sobre la obra, como un arrepentimiento que ha sido desvelado mediante rayos X.
Tras los protocolos previos, la restauración del cuadro se emprendió en septiembre pasado, ha costado 19.000 euros y ahora será devuelto a la colección permanente de la Fundación Lázaro Galdiano, en Madrid.
Además de recuperar la atmósfera del fondo y las encarnaduras del rostro del personaje, las tareas de restauración ha acentuado el retrato psicológico del poeta cordobés, según los técnicos del IAPH.
Para la restauración de este cuadro de 1622 se han empleado igualmente análisis químicos no destructivos realizados mediante microdifracción y microfluorescencia de rayos X, en colaboración con técnicos del Museo del Louvre.